Kelly M

Dime tú...

Ilógica-mente, todos se parecen a ti.

Pero ninguno eres tú,

con el rostro que amo

y las manos que ansío.

 


Incansablemente,

ya te sentí en todas partes,

pero nunca estuviste

y yo jamás volveré.

 


Si puedes, aconséjame qué hacer

cuando todos me reciban,

cuando algunos me amen,

cuando muchos me deseen...

Y ninguno tenga la sonrisa amorosa;

ni los ojos de cielo, que de ti adoré.

 


Si puedes, dime que me amas;

aunque ya no te escuches...

sólo yo te creeré.