Dejar volar mi sueño
ese fue mi pecado
pecado que hoy se pierde como viento lejano
si te soñé mil veces antes de tu llegada
y no supe retenerte
mientras te buscaba
tal vez mayor pecado fue no reconocerte
y entre tantos sueños no tenerte
y tenerte
cuando vuelva a soñar
soñaré entre cadenas
asegurando un sueño que no existió
apenas.