ALVARO J. MARQUEZ

DESPIERTO SOÑANDO

"Dices que amarte -y es cierto-/ los sueños puede prolongar,/ ya lo ves, yo estoy despierto/ y no he dejado de soñar".


Te amé, te abracé, estaba feliz, lo estaba,
hasta que un miedo me invadió de pronto,
de soñar toda la noche contigo despertaba
y no sé por qué, pero me alarmó no verte,
por primera vez me preocupó el no tenerte
aunque aquel temor ya me pareciera tonto.

Nervioso en mi celular tu número busqué,
no me importó estar en plena madrugada,
para mi sorpresa de ti, ni un número hallé,
fui a mi agenda donde te anoté en detalle,
tu casa, tu automóvil, el nombre de la calle
y en mi agenda tampoco pude hallar nada.

No perdí tiempo y me vestí con mucha prisa,
no me importó lo tarde para salir a buscarte,
tenía pruebas de tu llanto, también de tu risa,
no entendía la razón de este extraño extravío,
tampoco entendí cómo sintiéndote algo mío
esa noche sufrí el pánico de no encontrarte.

Tenía todo lo tuyo grabado en mi memoria,
los apuntes de mi agenda eran innecesarios,
era una verdad, una realidad, una historia
las confusiones para mí no eran probables,
la nuestra era historia de besos inolvidables
y de sentimientos reales y nunca imaginarios.

Pero la casa allí no estaba, tu auto tampoco,
ni la calle tuya se llamaba como lo suponía,
no podía ser que me estuviera volviendo loco,
a aceptar esa posibilidad claro que me negaba,
eran tuyos los besos que en mis labios guardaba
y tuyas las fotos y el perfume que en casa tenía.

Llamé a gente por ti y por mí familiar, conocida,
les pregunté a esa hora por ti con desesperación,
no conocían a nadie con tu nombre en mi vida,
me aconsejaron todos que te dejara de buscar,
que posiblemente ya me estaba dejando llevar
por los destellos resplandecientes de una ilusión.

Es increíble, después de que contigo me vi riendo,
me veía sin ti y me encontré en mi cama llorando,
ahora ya ves, me tienes aquí sentado escribiendo,
pensando que creo pero me cuesta mucho creer
en todas las cosas que nos pueden llegar a suceder
al creer que despertamos... y seguimos soñando.