Hay noches en las que se antoja
que la verdad aflore en su aroma
como esas mariposas en capullos
que sólo se abren a lo suyo
donde los verbos no trocan adjetivos...
sin volar en sus lindas prosas
perfumando lo que debe ser rosa...
impregnando los latidos de azul
en porfía al enfrentar su suave tisú...
hay noches en las que la luna
guiña sin siquiera mirarte
mas, sientes su poder apoderarte
huyendo del haz de su inquietante beldad
brillante... y tan desleída
sabes que el cielo no asiente y te mira...
Hay noches que no deberían llegar
manipulando la forma que quieres palpar
aunque manejes de manera magistral
sabes, siempre ha de ser subliminal
bien lo sabes y sonriente aceptas...
¡pues si no... estaría muy mal!
Si... hay noches y días
que simplemente...
¡no deberían arribar!
Copyright©2012 Rocío Vega-Ponce