Noche mágica, noche de locura, noche de pasión, noche en que te hice mía.
Te hice mía entre una lluvia de besos y caricias nacidas por un profundo deseo
Las miradas hablaban, las palabras sobraban, nuestros cuerpos temblaban y la ropa estorbaba
Tus manos deslizándose por mi cuerpo, las mías recorriendo el tuyo, tocándonos, palpándonos, sintiéndonos…
Mis brazos arropaban tu cuerpo desnudo, mis labios eran la prolongación de los tuyos, mi mirada se perdía en tu mirada, y el deseo se volvía pasión.
Gemidos… jadeos… y murmullos que explotaban en un millón de sensaciones cálidas
Tu vos entrecortándose, tus dedos arañado mi espalda, y tu sonrisa placentera me decían sin palabras lo mucho que me amas.
Esa noche fuiste mía, esa noche fui tuyo, esa noche fuimos uno.
Nunca pensé que alguien me amaría, y la verdad es que no merezco ser amado.