Quiero morir en martes,
ahogado en mi propia sangre,
anestesiado de amor,
de alcohol, de drogas
y de tus besos.
Quiero morir en martes,
acribillado por la mirada
de tus ojos, e intoxicado
por el aroma de tu cuerpo.
Quiero morir en martes,
entre tus brazos, mirándote
a los ojos, diciéndote
mi niña, diciéndote mi amor
diciéndote Te Amo
con todo el corazón.