Psicópata de la democracia, la renovada raza de los políticos argentinos.
No demuestran ser sádicos ni violentos,( por lo general, pero lo son) viven por si, solo encuentran valores en su interior, ni rastros de conciencia ni sentimientos, ni leyes ni reglas, jamás le significaron algo.
Dificilmente muestran alguna emoción, aun en presencia de la muerte de su propia sangre. (Llame-se hijos o padres), audaces al extremo en sus actos, planeados y por lo general violentos, con un control absoluto de su ansiedad, de conducta puntillosa, nada de lo que toman lo hacen sin colocarse sus guantes blancos.
Tienen un apetito desmedido por los bienes públicos y su carencia de temor le permite sin miedo alguno, infectar con el (V.I.P) virus de la inmoralidad política a cuantas personas se acerquen a ellos.
Inhiben con gran maestría, sus impulsos anti-populares, en todo momento y la misma palabra, tienen miles de significados distintos, según convenga a sus propósitos. la carencia total de sentimientos genuinos, les permite efectivizar con gran certeza el daño social, que va más allá de lo económico, pues su verdadero objetivo es el sometimiento a la necesidad y el dolor constante de todo aquellos que dependan de ellos.
Todo lo ilícito, ilegal o prohibido, lo potencia en la generación de planes para causar el mayor desmán en el menor tiempo posible.
Sin duda que la herencia genética, en esto en muy notable, este país, sufre ciclos constantes de esta psicopatía política, cada diez o doce años, lo lamentable de esto es que cada ves se ve más potenciado.
Y lo que agrava esta situación, es que los de la nueva generación, son demoniaca-mente, encantadores atractivos y geniales mentirosos. Manipuladores de la urgencia de la necesidad de los desposeídos. Renuevan permanentemente sus técnica de expresión de la misma mentira.
Su codicia por el poder es tan grande, que no escatima esfuerzos , para lograrlo no hay métodos que no utilicen para ello, llame-se plagio, estafa, etc. Pero por sobre todo el dolor y la necesidad ajena es lo que le causa el mayor placer. Egocéntricos al extremo, prefieren que los aduladores de turno le hagan su periódico propio y quien no respete esta norma es vil mente sacrificado al ser culpado, degradado y echado en público. De esta manera el indefenso cordero sangra infeliz mente en nombre de los procede-res antisociales del poder.
Negadores conpulsivos de la realidad, que cuando son descubiertos sus mentes afiebradas ya tiene una nueva mentira que reemplazará a la anterior.
Arrogantes y engreídos, beben champaña sobre la basura de su propia iniquidad,
No salen los días de lluvia para no mojar sus zapatos importados y desde sus increíbles oficinas, apuestan permanentemente al compre nacional.
¿Me pregunto que pasa con nuestra sociedad, ¿Ha perdido su voluntad de ser? ¿Sucumbio a la mentira y el engaño? ¿Quë terapia podría sacarlo de este estado de indefensión con características de eternidad?.
No Hay que esperar un milagro, los psicópatas de la política no cambiaran. Ya no se puede perder más tiempo, el pago por esperar solo será la traición.
Pueblo mio, dejad de tomar el vino de la trivialidad cotidiana y sube a la barca de la responsabilidad ciudadana controla, controla, educa-te y observa.
O tus hijos serán los náufragos eternos, de una fatua libertad de llantos y oscura eternidad.
L.M