El día que me vaya.
El día que me vaya amor mío
montaré mi alado blanco,
para tocar las nubes
sobrepasar las estrellas,
descubriendo incógnitas
que siempre me han gustado.
No derrames tus lágrimas
sobre mi cuerpo yerto,
allí ya no habrá nada
para poder sentir
como te expreses,
me dieron el boleto
para el viaje
mientras tú dormías.
Mas no te olvidaré…
sentirás mi presencia
en nuestro lecho,
mi boca te dará los besos
envueltos en la miel
de amor eterno,
las manos te darán
las cálidas caricias
en el desnudo pecho,
donde dormía feliz
bajo tu dulce abrazo.
Ora por mi amado mío,
fueron largos los años
compartidos de dos
en el inicio del idilio,
en uno nos convirtió
el mimetismo
seremos uno entonces
donde estemos.
Te esperaré…
no importa cuánto tardes,
para abrazarnos
como desde novios
fue la gran costumbre,
no me olvides nunca
razón de mi existencia,
así esté de viaje
tenme en tu recuerdo,
todo lo vivido
servirá de lumbre.
RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS DE AUTOR:
MIERIAM RINCÓN URDANETA.