Un soplo de alegría
me sobrecoge esta tarde
cuando tus ojos me dicen
que deseas conquistarme.
Y no sabes que estremezco
con tan sólo mirarte.
Que te daría todos los besos
que un día soñaste.
¿Por qué será que el universo
juega con todos nuestros planes?
¿Por qué será que la vida
se compone de tantas casualidades?
Lo que siento no es un secreto
ni para ti ni para nadie.
Es el amor más intenso
que podrías imaginarte.
Salgo a tu búsqueda corriendo.
Es como un tren que pronto parte.
Pero tú llegas allí primero
Y te quedas a esperarme.
Es el momento perfecto
para pedirte que me ames.
El mundo tiembla en silencio
y tus manos juegan en mi traje.
Yo no sé si para siempre
podré vivir y acompañarte.
Pero sí sé que estoy segura
de que habrá tiempo para darte.
Empieza con un beso, vida mía,
esta historia interminable.
Dame una nueva alegría
para poder regocijarme.