Si alguien me pregunta
¿por qué escribo poesía?
no sabría… qué contestar
es algo…que nunca he podido entender
¡si la poesía nunca antes la sentía!
¡ajena era de su existencia!
tan solo…un día me asaltó de improviso
y sin previo aviso…¡se apodero de mi ser!
a mi alma conquisto
y a mi corazón enamoró…
me quede quieta … permanecí en silencio
escuchaba a mí corazón que me hablaba
las palabras nacieron y por su corriente me deje llevar;
las palabras se fueron saturaron
en mi alma y corazón
¡como un volcán brotaron!
cual si fuera lava ardiente
corriendo por los dedos en ansia incontenible por hacer erupción.
Más a lo que escribo…no sé si llamarle poesía
las he bautizado como “mis locuras”
mis dulces y bellas…locuras
en las que solo expreso
lo que el alma dicta
lo que el corazón siente
o lo que provoque el momento
sea en una tarde lluviosa
un atardecer hermoso
un día sombrío
una mañana esplendorosa
una noche mansa
cuando el alma llora
cuando el alma canta
cuando el corazón sufre
o herido de muerte esta
cuando el corazón y el alma se encuentra alegres
cuando piedras en el camino encuentro
cuando la vida se torna espinosa
cuando la soledad se vuelve fría y oscura;
son historias propias y ajenas
¡vivencias extrañas!
que a mi alma sacuden
¡nada de mi vida tienen!
pero…a mi vida todo son
¡vida a mi vida dan!
Para escribir,
se necesita alma, corazón, sentimiento y una musa
¡musa que de repente se ausenta!
y como huérfanos nos quedamos
¡perdidos!
¡extraviados!
sintiendo…¡que algo nos falta para seguir viviendo!
mas…cuando regresa
regresa con las manos ¡colmadas de manjares!
dulces, salados, ácidos, agrios
para satisfacer los diversos paladares
aún el más exigente;
solo que…a veces, se va por siempre
y es…cuando se siente la muerte
al no poder expresar lo que el alma soporta
lo que el corazón viste.
Yo tan solo escribo lo que siento
de versos, métrica, rimas, silbas y prosa
¡perdida me encuentro!
extraviada entre las encrucijadas de su laberinto;
mi entendimiento…es tan pobre
que muy apenas sé lo que es el predicado y el sujeto
y aun así corro el riesgo de errar;
lo que expreso
tan solo “locuras” mías son
que a mí mente sin esfuerzo fluyen
y vaciadas en un papel son.
Que a veces lo que escribo rima
¡simple coincidencia de las letras!
pues solitas se acomodan
muchas otras no coinciden
mucho menos riman,
más con rima o con verso
sin rima y sin verso
mi pluma tan solo expresa
lo que el momento precisa
palabras que como torrente de agua brotan
¡que piden a gritos!...alas para volar.
NM de la Rosa