habita
en la vereda
del frente...
Un día
vió la luz
en mi calle...
Echó raices
y desplegó
sus alas-floRes
rosas
para alegrarme...
Habitamos
dos mundos
que se rozan
sin preguntas...
que se espían
en silencio...
sin reproches...
No le molesta
que fume....
no le molesta
el volumen
de la radio...
Le basta
mi presencia...
Es por las noches
cuando más
nos buscamos...
Cuando el viento
nos acaricia...
y entonces,
somos
amantes
por un rato....