Todo lo que queremos hacer bien en esta vida requiere una entrega, nada se desarrolla y crece por si mismo y necesita de nuestra atención continua, nuestra entrega y una gran dosis de cariño.
Es lo importante en todo lo que emprendemos y sobre todo en las relaciones personales y esa faceta tan importante que es la amistad, la verdadera, no la de bares y saludos, la amistad que se cultiva con el corazón y en la que no hay intereses de ningún tipo, solo ese interés de hacer sentir al amigo querido y respetado y tener siempre las atenciones para con el que lo hagan sentir así, aliviando esas soledades que siempre están al acecho en el alma humana.
Después de muchos años vividos, muchos amigos quedados en el camino y a estas alturas, mi recuento de amistad se queda en una sola persona, mi querida amiga Carmen Diez Torio, a quien no conozco personalmente, ni siquiera conozco su voz, pero hay una cosa mas importante que si pude conocer a través de sus libros y nuestros mensajes diarios, es ese corazón tan grande que tiene, es su honestidad como persona, es la dulzura de su alma, es la entrega a sus semejantes y es esa amiga fiel que no te juzga y siempre esta a tu lado para saber de tus éxitos o fracasos, tus alegrías y tus penas.
Es por eso que ahora recién levantado y con una taza de café sobre el escritorio, quiero compartir estos sentimientos contigo y mi café, dándote las gracias desde mi corazón, por que me siento un hombre privilegiado al contar con tu amistad pura y sincera. Gracias mi solecito y muy buenos días para ti.
Es la amistad un tesoro
que tengo que acrecentar
con esos pequeños detalles
de ternura y de bondad.
Es la falta de egoísmo
es poner toda ilusión
en ese cariño tuyo
que alegre tu corazón.
Es estar siempre presente
en tus penas y alegrías
es el mayor aliciente
para tu vida y la mía.
Eso es mi solecito
mi Carmen de cabellos de oro
esa es nuestra amistad
que vale mas que un tesoro.
Ángel Reyes Burgos