tras de una nube
los sueños del poeta
buscan su sino
Vive en mí. Un sueño en suaves estallidos.
Me despierta con sones de campana
para emular en rimas los tañidos.
Transitando veredas de mañana
a una flor le hurta aromas y latidos;
a través del cristal de la ventana,
aprisiona los trinos del jilguero,
atrapa el viento y llantos de aguacero.
Revive años de nieve y arenales,
indelebles recuerdos familiares,
pinta una oda de pampa y de trigales,
un sur de lagos, cumbres y glaciares,
campiñas con esencias musicales
y se enamora en sendas de otros lares.
Vuela a la par de endebles mariposas
para caer rendida ante las rosas.
Le enternecen un niño y su sonrisa,
y juega con las hojas alocadas
que el otoño descuelga con su brisa.
Se resiste a las viles estocadas
que el tiempo arteramente le desliza
y se ampara en sus letras bien amadas.
A la mujer le ofrece su respeto
y odia a quienes la tratan como objeto.
Se aleja de las vanas discusiones,
sólo quiere un rincón de fantasía
donde no haya sitio para adulones
ni lugares para la hipocresía.
Mi poesía eleva los blasones
de la paz, la amistad y la alegría.
(Si es noche, con rayitos de una estrella,
vierte su ternura en versos para ella)
Derechos reservados por Ruben Maldonado.