He visto la locura de veranos
por tus curvas de mares formidables;
los vientos se posaban en las manos
y las anclas quedaban sin sus cables.
Sin brújula en océano bravío
ondulaban caricias de navío.
Soy dueño de tus aguas en mis noches,
tu marea se sube por mi roca;
luna llena mirando los derroches
de mis costas bañadas por tu boca.
Van mis ganas cruzando la bahía
de tu cuerpo de azul geografía.
He varado en la playa de tus ojos,
has llenado mi piel de dulce arena.
Soy pesquero de miel en labios rojos
y en mi red ha quedado tu colmena.
Tus olas y mi orilla son un beso
de la eterna pasión que te profeso.
Copyright © 2011 José Luis Calderón.
Del libro Raíces de la Marea.