A tu paso vuelvo a mirarte,
a tu cadencioso caminar,
que deja tu olor envolvente,
dejándome sin respirar.
Sopla el viento muy fuerte,
y se enmudece la brisa,
por tu presencia ardiente,
que me deja tu sonrisa.
Tu aliento huele a rosa,
tu cuerpo a clavel,
tú la más hermosa
cada día me das tu querer.