Meditación diaria
A mi alma ha llegado el anhelo
De elevar mi voz al cielo
Para exaltar tu gloria oh Dios del cielo
Mi espíritu te alaba Santo Cordero
Que deleite a mi espíritu es buscarte
Y sentir tu presencia, que es medicina,
Que sana, las heridas de mi vida
Aquí estoy, delante de ti, para honrarte,
Con el amor de mi meditación diaria
De momento no quiero alejarme
Quiero estar así, adorándote
Que más puede hacer mi corazón,
Agradecido por tu amor
Solo venir a buscarte para que des paz
A mi alma que te busca cada mañana
Mi espíritu por ti clama, deseando,
Tener una intima comunión contigo
Mi Rey, y fiel Maestro, Consejero,
De mi andar y mi reposo
A ti dedico este tiempo porque Tú eres,
La inspiración y motivo de mi gozo
Enaltecerte es el deseo de mi alma
Porque eres lo más grande de mi vida
El hambre que por ti me guía,
A buscar el alimento de mi vida
Y te exaltare oh mi Dios, mientras viva
Estaré delante de ti rendida,
En adoración mi Dios, luz de mi vida
ALICIA PEREZ HERNANDEZ
(No es la pluma la que escribe es el alma)