La debilidad hace que
los deseos se aglomeren
en un sentir que ni yo misma entiendo
quisiera sentirte, decirte que
eres retazo en estas inquietudes
que en el transcurrir de los años
apaciguan se transforman.
Un abrazo en una pieza frágil
débil a tus fuerzas, tus deseos
que conllevan sentimientos encontrados
y no logras descifrar.
El secreto más íntimo se revela
en tu mirada, en tu silencio
Hiere más que los padecimientos
de una hoja marchita observando el
Brote del nuevo amanecer.
Y no percibes el aroma, lo sutil
de una mirada, el roce inquietante
la agitación cuando te aguardo
el beso en cada despedida.
La sonrisa, la alegría de vivir
la fusión de las almas que
se entregan dóciles en una Pasión
celosa de no romper el alma.
Frágil como mi cuerpo.