Ya te cambié de nombre
ya no te llamas como un niño,
tu nuevo nombre, con las vocales iguales no me gusta, no me gusta nada.
Ya te cambié de rostro, tus tonos son distintos.
Ya no eres el mismo de antes.
Te dije que renacerías.
Ya no besas igual, ni sonríes ni juegas igual.
Ya nos encontramos y no me recuerdas, ni recuerdas quién eras
Y sabes más de lo que un viejo libro, sabes.
Sabes a sal.
Ya te llamas, como cuando me dices tu nombre...
Bienvenido seas al hogar de mis arterias, si quisieras ser mi sangre, al fondo a la derecha.
Sammantha