según las condiciones climáticas
y el humor de las montañas
puede escucharse
como de tan lejos que nadie se aventura
el menudo cantar de trenes
tal vez azules o transparentes cómo saberlo
Los aldeanos esperamos
tanto esas fechas para el recuerdo
que dejamos en el aire cuanto las manos
soportaran de improviso
se interrumpen las declaraciones hasta que la muerte
y la monotonía de una radio repetidora
todo por concentrarse como mejor sepamos
para captar con fidelidad de ciegos ese sonido
tan particular que causa modorra
Durante las fiestas y velorios
inevitables por igual
hay que convencer a los parientes
llegados desde tan lejos
de que esto no es más
que otra característica en nuestra
tierra salvaje y aislada sin excusa
Sin creernos ni montar en cólera
toman la siesta mecidos
por canciones de remotos durmientes
Y todo vuelve a marchar sobre ruedas
que se saben la melodía
A la prensa le mentimos con descaro
e infantil picardía