Hugo Emilio Ocanto

Un intérprete disgustado

Estoy sentado

frente a mi

computadora.

No decido

cómo expresarme.

¡Tantos temas

vienen a mi alma.!

Y me decido

por este...

Recibí el año

pasado un

mensaje

en el cual

un director

teatral

me comunica

que una producción

necesitaba un actor

de mi edad

para hacer personaje

en una película.

Me comunico con

esta persona

representante de

la producción.

Nos citamos

en un bar

para tomar un café.

Charlamos un rato

y después

dos personas

más se acercan

a nosotros.

Así que éramos

dos productoras,

un director

y un intérprete.

Charlamos largamente

y combinamos

en que en un breve

tiempo

comenzaríamos

a filmar

en capítulo

que yo intervendría.

Al despedirnos

les comenté

que los necesitaba.

Una de las

damas me contestó

que ellos también.

Me prometieron

varias cosas.

Cosas les

llamo yo.

Me refiero

a vestuario,

personaje,

comidas,

puntualidad,

etc, etc.

Llega el día

de filmación.

Realizamos escenas.

 Y así sucesivamente

hasta el final.

Desde el primer

momento les dije

que yo tendría

que terminar

antes de fin de año.

Estoy refiriéndome

al año pasado.

Por cuestiones

de tiempo

no pudimos terminar

el capítulo

en la fecha

prefijada.

Quedamos que a

la vuelta de

mi viaje

continuaríamos.

Previo a mi viaje

solicité cobrar

mi cachet

como se

me había

prometido.

El cual me

fuí de viaje

sin que me

pagasen.

Durante el viaje,

envié un mensaje

por celular

diciendo que

renunciaba a filmación

debido a su

falta de palabra.

No me dieron

un solo peso.

Aún cuando

uno de los directores

me comentó

que " unos pesos

de más no me

vendrían mal

para disponerlos

en mis vacaciones."

Trato de sintetizar

este acontecimiento.

Después de mi

mensaje me responden

a mi computadora.

Ese mensaje

me lo enviaron

dos días después

de mi partida.

Ellos sabían que

yo no podía leer mje.

desde el lugar

que me encontraba

sin haber recibido

por celular una

anticipación de

dicho mensaje.

En definitiva.

Vuelvo y de

común acuerdo

me reintegro a la

filmación.

La cual después

más de tres

meses, no pudimos

concluírla.

"Falta de fondos",

me dijeron.

Mentiras.

¡qué difícil

es a veces

el confiar en la gente!

Lo triste del caso

es que uno

confía y otros

te decepcionan.

Te mienten.

No todos.

Pero estos sí

lo hicieron.

No sólo conmigo,

sino a varios

intérpretes.

Se nos prometió

el oro y el moro.

Mentiras.

Y después,

otros sucesos

internos

de falta de palabra

y promesas.

Decepcionante.

Todo.

Inaceptables argumentos

que me tienen

mal.

No se puede

jugar con los

sentimientos

del intérprete

a través de

mentiras.

Finalizo aquí.

La película

llevará más de

un año en concluírla.

Tal vez no está

bien lo que he transmitido,

pero es una realidad.

Promesa de un dinero,

del cual no

he recibido

un solo peso.

Solamente el pago

de viático.

Pido disculpas

por estos comentarios.

Necesito hacerlos.

Espero no perjudicar

a nadie.

No es mi intención.

Necesitaba desahogarme.

Y en ustedes he confiado

para que lo sepan.

No se puede

JUGAR con los

sentimientos

y credulidad

de un intérprete.

Gracias por leer

esta denuncia emocional.

Todos los derechos reservados al autor ( Hugo Emilio Ocanto- 15/06/2012 )

 

 

 

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