Groill y Toun, dos amigos intelectuales, hablaron de su pueblo, acerca de la gente, como se comportaban, y llegaron a una conclusión: “en este lugar todos están dementes”.
La iglesia mata a las personas que no cree convenientes para ellos, los condenan a la hoguera, por lo tanto son asesinos; el pueblo adora a los que ellos imponen como santos y respetan las decisiones del clero, ósea que el pueblo es cómplice de los asesinatos de personas señaladas como herejes, damos como resultado que el clero necesita un tratamiento mental que mejore su forma de actuar con los habitantes.
Los reyes son encomendados por Dios, según la iglesia y están llenos de lujos gracias al trabajo de los demás, sus guardias maltratan, amenazan y ayudan en la muerte, cuando le sirven a la iglesia a capturar a los indeseables para sus ideas. El pueblo le rinde pleitesía a estas familias reales que para ser encomendadas por Dios son igual que nosotros, si se cortan su sangre es roja no azul como muchos creen, comen, duermen, sueñan, defecan, igual que nosotros, no hay nada de mágico o de supremo en ellos para ser elegidos por Dios, son parásitos de nuestro pueblo, aun así la gente se arrodilla ante su presencia, las personas tienen que pensar y así curarse de esta demencia social que no deja progresar nuestras ideas y nuestro convivir.
Los aristócratas, personas adineradas miran con desprecio a los trabajadores y campesinos, siendo estos los que le llenan el estómago con delicias de la tierra, así como hay adictos al alcohol, al opio y a la comida, estos enfermos aristócratas están adictos al dinero de tal forma que no les interesa lo que pasa con los demás, por lo tanto necesitan tratamiento, pero la gente de este lugar esta demente, porque sueñan con tener esa enfermedad, cuando ven una persona adinerada se sienten sumisos y le brindan cortesía de una manera especial, alimentando aun más el ego que incrementa el nivel de la enfermedad, aumentando su prepotencia, en conclusión todos están enfermos, todos necesitan tratamiento, todos están dementes.
Groill tiene un amigo en el diario, trata de convencerlo para que la información sea distribuida a las personas de aquel lugar, Toun le dice al chico que es urgente, porque todos necesitan saber lo enfermos que están. El chico temeroso de sus ideas, publica la información repartiéndola por todo el pueblo.
Los vellos se erizaron a todo aquel que leía el artículo, muchos empezaron a pensar en las cosas que estaban pasando y en lo fuerte que eran esas palabras publicadas en aquel diario. La iglesia, la aristocracia y la realeza explotaron de ira por tal comentario, entonces empezó una búsqueda intensiva.
Los soldados al servicio de la realeza buscaron casa por casa el artículo que se repartió ese día, capturando a todos los que lo leyeron, incluyendo a todos los empleados del diario. Siendo prisioneros los mataron, degollándolos uno por uno, a los amigos Toun y Groill los amarraron de las manos y pies en un grueso tronco, ellos estaban de pie sobre todos los artículos recogidos, en presencia de los altos cargos de la iglesia, las familias reales y las familias aristócratas, incendiaron los escritos para que mataran de esta manera cruel a sus creadores, victimas de su propio invento, Groill le dice a Toun: “pensaran que nosotros somos los dementes por publicar tal artículo, y moriremos por el temor de estos enfermos, temen reconocer la verdad, todos están dementes”.
Un joven amigo de Toun, que leyó el artículo, alcanzó a escapar de las autoridades locales, huyendo para Francia. Al pasar de los años ocurrió la revolución francesa, este joven que escapó de aquella matanza se llamaba Maximilien Robespierre.
TIANA CAMELO