¡Oh tristeza,
tristeza mía!,
mi eterna compañera
de mi no te alejes
que sin…ti nada soy
te pido amiga mía
¡no me prives de tu presencia!
que desolada…sin ti estoy,
¡tú eres mía!
yo…solo tuya soy
¡no permitas que la alegría!...
con ella me lleve
pues sin ti…perdida estoy.
¡Oh tristeza!,
no me prives de tu compañía
ni permitas que alguien más me seduzca
que haría…si tuya no soy.
¡Oh tristeza,
tristeza mía!,
no rehúyas a mi vida
que mi vida…tan tuya es
¡no me apartes de tu lado!
y a otros brazos corras
donde solo Dios sabe…si te querrán igual.
NM de la Rosa D.R.