Olas impetuosas resbalan
en lágrimas que sollozan
al frío de las corolas más sedosas...
en un tris me encuentro
sumergida en tu ocre matiz
destilando vahos de alientos
que en tus tibios vientos
vertiginosos en mis venas
vibran incontenibles,
movimientos del alma
que en mi jadeante pecho
como perlas estallan...
contemplo como flotando
en otro espacio y tiempo
mi ser levemente levitando
al vibrar del violín
de tus tiernos dedos...
veo que viras a mí...
la bruma de la bahía esfuma
no hay rocas, murallas forjadas
la brisa desliza y penetra
en cada una de las letras
que en mareas nadan al puerto
de los latidos a mar abierto...
diviso tus visos etéreos
que ni la niebla, el frío o el tic-tac
en nuestro universo diluirán...
Al otro lado de la bahía
mi pulsar aún te espía...
Copyright©2012 Rocío Vega-Ponce