nelida anderson parini

INFIEL... UNA MUJER ENAMORADA.

Éste secreto guardado,

de mil voces contenido,

hoy derrama en estallido,

lo que estaba bien sellado.

 

Aunque teniendo marido,

como a ti  a nadie he amado.

Y si quererte es pecado,

el pecar he consentido.

 

Éste cariño añorado,

Que dicen es prohibido,

es mi jardín escondido,

con caricias cultivado.

 

El renacer colorido,

de manantial perfumado,

que amanece engalanado,

como rosal florecido.

 

Un beso al viento entregado,

en fulgurante latido,

que corriendo inadvertido,

en tus labios se ha posado.

 

El suspiro hondo y sentido,

de ilusiones impregnado.

El aliento enamorado,

evocando lo querido.

 

Ese roce presentido,

al pasar justo a tu lado.

Que sabiéndose observado,

el abrazo ha extinguido.

 

El instante perseguido,

por dos almas en privado,

el amor exacerbado,

roba al tiempo recorrido.

 

Un momento congelado,

cien mil veces revivido,

repitiendo incontenido,

un amar desenfrenado.

 

Si al haberte conocido,

el destino ha conspirado,

en tus brazos he encontrado,

el refugio más querido.

 

En tus manos he confiado,

mi tesoro consentido,

mi legajo comprimido,

mi presente y mi pasado.

 

Aquel que amar no ha sabido,

su vivir ha silenciado,

su alegría ha marchitado,

en las aguas del olvido.

 

En tus ojos he sembrado,

horizonte indefinido,

un universo nacido,

en implosión desatado.

 

Hoy mi voz ha resurgido,

en sentimiento exhalado.

Y éste amor tan esperado,

por fin gritar he podido.

 

En tu amor he recobrado,

el anhelo más querido.

El camino perseguido,

a tu mundo me ha guiado.

 

El corazón suspendido,

palpitando emocionado,

con latido esperanzado,

desnuda su contenido.

 

El silencio está quebrado,

el espacio estremecido.

Que lo escuche todo oído:

como a ti, jamás he amado.