Cuanta luz y cuanta belleza,
Que da igual la tristeza
De saber que ni una es para mí,
Tentando al vacio
Se encuentra la certeza
Que ya de tu grandeza,
Ni una es para mí.
Comprendo la importancia,
Que fluye cual fragancia,
De encontrarme con tu sustancia
Repartida entre tantas ansias,
Y ni una es para mí.