Sin importar si tienes muchos o pocos amigos
Ellos en silencio siempre gozan todo contigo
Preguntándose donde te encuentras ahora
Perdonando tus fallas y también tus demoras.
Quizá no te dicen siempre “te quiero”
Pero lo demuestran como nobles guerreros,
Te aconsejan en cada tormenta y deprisa
Y esperan de ti lo mismo sin prisa.
Son como hermanos en momentos de angustia
Y semejantes a lluvia en tiempo de amustia
Te dan libertad cuando te sientes aprisionado,
Lealtad cuando crees que te han abandonado.
Llegan como un rayito de sol en fríos inviernos
Como un lápiz de color entre negros cuadernos,
Y quizá muchos de ellos se quedan y otros se marchan
Pero siempre dejan huellas que nunca se tachan.
Tu familia los consideras en todo sentido
Por que comparten lagrimas como seres queridos
Comparten disputas y risas que los unen con fuerza
Para jamás separarlos por las incidencias adversas.
En el futuro tal vez cambien en muchas cosas
Muchas solteras y otros quizá con esposa,
Aun así todo ese camino no habrá sido en vano
Por que valió la pena recorrerlo con tus hermanos.