En este libro íntimo
de dos hojitas blancas
dibujamos dos niños
con hermosas miradas,
encendimos el fuego,
nos hicimos dos plantas
mojadas de rocío
al incendiar mañanas.
En este libro íntimo
envueltos en frazada
con abrazos candados
y pícaras ojeadas
escribimos la vida
gastándonos el alma
de mordernos los labios
con dos bellas palabras.
En este libro íntimo
acolchado de besos
en un jardín de amores
alcanzamos el cielo.