El sol pudre la tarde de nuevo, esta rutina es la resurrección de un agosto en una cama la cual esta desnuda de fundas y perfumes de sal… Era mas fácil sin vos, antes sabia sonreír, ahora soy un magnifico escultor de apariencias, eran tiempos buenos los que permitían hacerte el amor con solo tocar tus fieras uñas, ahora suelo aletargarme soñando despierto y en el averno de mi voz solo hay trocaros de vos, esparcidos en esta habitación y en cada una de sus ocho esquinas… Y no se si es la luz que quiere entrar bajo la puerta o es que la penumbra tiene miedo de tocar ese camino, algo quieta pone los mismos limites que quedaron entre nuestro destino… y juro que en cada esquina puedo ver saliendo tu espalda con el sostén a medio caer, como un pequeño demonio que carcome mis nostalgias, que en cada destello y pestañeo me baña en tu imagen limpia de presente, tal y como fuiste antes de la hecatombe que nos marco la piel… Estas en todos lados, lastima que yo nunca mas estaré dentro de vos acompañando un gemido y un vals orgásmico elegante y elevador, lastima que nuestro amor, es tan libre que nos lo prohibimos para no romper esa frontera entre el umbral y la perilla, entre tus horas y esto en lo que transmuté.