LAS SOMBRAS DEL INSOMNIO
La negritud, de la noche siniestra,
me aprisionaba con fuerza…
Las sombras del insomnio me envolvían,
sentí cadenas aferradas a mi cuerpo,
tan pesadas, como mi melancolía.
El flagelo de la tortura sintiendo
inmersa en mi tristeza,
la condena del tormento viviendo…
Momento que se eternizó en mi tiempo,
para hacer más lenta mi agonía,
viendo, un desfilar de horas ateridas,
vestidas de pálidos fantasmas,
cayendo en la mortaja,
irradiando su albura en mi nostalgia.
Felina