Ayer la lechuza
dejó el chocolate
y dio como excusa
que comió bastante.
No quiso siquiera
ni probarlo un poco
como si eso fuera
comida de otro.
La lechuza ayer
dejó el chocolate
no quiso ni comer
y se fue a otra parte.
Qué gran disparate,
cosa tan confusa,
darle chocolate
a una lechuza.
Alejandro J. Díaz Valero