A lo lejos noté un brillante destello
Luz tan cálida y suave, tan sutil y tan bella
Me inundó por completo y me rendí, pues aquello
No podía ignorarse ni un instante, me mella
Que dichoso momento en que tu sello
Elegante y sincero, con cariño, destella
A mis ojos sensibles a tu encanto y centello
Que mujer tan radiante, mi motivo y mi estrella
Te dedico mis versos, un suspiro y sonrisas
No leerás mis palabras, lo sé, pero muy pronto
Ganaré tu confianza y tu amor, bien, sin prisas
Me despido, mi ángel, y deseo mil brisas
Te acompañen y cuiden muy bien desde el gran ponto
Y te juro que quiero escuchar ya tus risas