Busco una razón para olvidarte,
busco una mirada de otros ojos,
la sonrisa de otro rostro
y siempre llegas a mi oscura soledad.
Vagando voy por la noche,
sintiendo solo el frío,
hay algo que de tí no olvido
y es tu duro corazón.
Quisiera aprisionarte,
quisiera no dejarte ir,
pero cada que te marchas
se muere algo en mí.
Perdida por las calles
sigo tu rastro siempre
y aunque sé que me quieres,
yo no dejo de pensarte.
Buscando me la paso,
queriéndote abrazar,
solo recibo tus migajas
y tu frio mirar.
Ojala tu me recuerdes,
me vuelvas a querer,
yo sé que dentro de tu alma
me amaste alguna vez.
YOLANDA BARRY
1983.