¿Y ahora?
quién besará mis letras
con sus ojos radiantes
y un suspiro contenido?
Quién le dará sentido
a mis poemas delirantes
de amor anhelante
suplicante y atrevido?
Quién obtendrá calor
con mis versos encendidos,
a fuego lento concebidos
y cargados de pasión?
Quién, sin ti, amor,
hará que esta pluma
despierte en plena noche
llena de inspiración?
Quién se beberá
el néctar de sus sueños
si no es su propio dueño
el que los leerá?
Quién, mi vida, quién
hará latir mi poesía
como tú lo conseguías
con solo respirar.