Señor Dios de los humanos;con la humildad de mi corazón,me atrevo a
dirigirme a ti para pedirte por mi amo;que llegue a ser tan fiel a los demás
como yo soy con él.Que sea leal con sus creencias y con todas las
personas que dice que ama.
Hazlo capaz de respetar a todos los suyos,ya sean amigos o enemigos.Y
que no hable mal de nadie,así como yo procuro no meterme en vidas
ajenas,con intenciones torcidas.
Dale otra expresión a su cara,llénasela de alegría y de optimismo que yo
le manifiesto todos los día moviéndole la cola...aunque se le haya
olvidado ponerle alimento a mi cazuela donde me enseño a comer.
Dale espiritu de gratitud,de ilimitada gratitud a todos,y,sobre todo,a
la vida,equivalente a la que siento por él siempre que lamo su mano;
por que tú, Señor,así me enseñaste a darle besitos a todos,absolutamente
a todos los que se me acercan;creyentes,ateos,ricos,pobres,negros
y blancos.Por que nunca me dijiste que en amor había diferencias,ni
dejaste que el resentimiento y la envidia anidarán en mi corazón.
Llénalo de una paciencia igual a la mía cuando me quedo horas y horas a
la puerta,esperando que llegue y me diga con una caricia lo mucho
que me quiere.
Dile,Señor,que no se queje del dolor y de las cosas feas que sucedan,
como yo acepto por igual la lluvia y el granizo,las pulgas y las lombrices.
Llénalo del valor y del desprendimiento que me enseñaste para que no
viva exclusivamente dedicado al amontonamiento de cosas,como si fuera
a existir para siempre.
Y cuando llegue la hora de morir,dale la sabiduría que pusiste en mi alma
de perro para que sepa aceptar ese instante sin temor y sin amargura.
En fin Señor de los humanos,tú que eres amor,luz y vida,haznos a los dos un poco más digno de ser fieles servidores tuyos...
ANONIMO.