La fragancia del amor vive en ti
descansa en los pétalos sagrados
que sólo tu suave piel entrega
a mi corazón enamorado
cuando las olas del frenesí
entre mis besos se desesperan
si bebo del caliz dorado
que has guardado para mí.
Tu gemidos de noche de luna
susurros de infintos deseos
pasión de lluvia furiosa
que siembras angustias sensibles
que dejan en mi vida locura
y me siento fallecer mientras veo
morir mis carnes lujuriosas
de tormentos profundos, increibles
parecen tus besos torturas.