Ayer nuevamente nos reencontramos
tocaste la puerta que muchas veces te esperó
salí a abrir y estabas tú con aquella sonrisa
te dejaste llevar a ese rincón que nos cobijara
las paredes de mi cuarto se estremecieron al sentirte
y mis manos con un tremor nervioso tomaron tus manos
sentí nuevamente esas tus mejillas frías por el tiempo
que irradiaban el calor tímido de nuestro encuentro
Volver a ver y deleitarme en esos ojos juguetones
escuchar nuevamente esa tu risa infantil y traviesa
esa tu voz ronca que me sedujo y cautivó tantas noches
saber que otra vez puedo darte mi consuelo y protegerte
así sea por este momento, aún sea por ésta única vez
cuidar de ti y de tu salud nuevamente como siempre lo hacía
fue una extraña sensación alegre de volverte a soñar
no hubo reproches, no hubo resentimientos
solamente el reencuentro de nuestras miradas.....
de nuestras vidas envueltas en la tristeza de la soledad
Y de ésta vez fue diferente
porque acabando ese momento mágico
la realidad se nos vino encima nuevamente
tuviste que marcharte y no pude retenerte
fue un fugaz encuentro sin promesas
quizás la ansiedad de volver a sentir lo que ya fue
ahora nuevamente el vacío sin eco de tu voz ni de tu risa
tal pareció el despertar de un sueño de vuelta atrás
de ese amor del pasado......
Para tí.... Neyi
de: Victor Hugo