DICOTOMÍA
Me dices que me amas, con suave ironía
me das un beso con labios fruncidos
y aún con esperanza, en mi lenta agonía
naufrago en el edén del placer perdido.
Y preso noche a noche en esta dicotomía
se agobian mis sueños que ya están vencidos
entre tu amor y desdén cual funesta sodomía
se convierte en espera el llanto vertido.
Y aún en la ofensa, cual débil iluso
añoro de tu boca la miel regada
que sueño tomar con liberal abuso.
No sé si eres otra o eres mi amada
senil, en esta relación, confuso
me arrodillo a tus pies a la primer llamada.
Guivel