Donde hay una mujer...
la conversación se torna elegante;
se cuida hasta el tocer;
el hombre se hace adulante.
Donde hay una mujer...
afloran los buenos modales;
no se habla de envejecer;
no conviene hablar de males.
Donde hay una mujer...
hay fuego en un corazón,
y el tono se hace elegante.
donde hay una mujer...
sabemos que a la sazón,
la vida sigue adelante.
Autor:Bernardo Arzate