Tocadas las once
se despiertan mis ansias
de sentir mi cuerpo bajo el agua
Me precipito en salir de la habitación
me adentro en esa esquina
cerrada con cristales transparentes
y me quedo observando un instante
los distintos jabones que hay en el estante
Me decido por uno que me deje la piel fresca
pues con el calor de la noche
cualquiera no arde...
Me he acordado de ti
y de las veces que he querido
ser jabón en tu estante
Sintiendo cada movimiento
he puesto jabón en mi esponja
y he detenido con mi mirada
ese instante en que él se esconde en ella
fusionando sus texturas
y siendo tan solo una...
Con suavidad y silencio
recorro cada parte de mi cuerpo
acompañada del fresco aroma
que va desprendiendo cuando me roza
Cubierta de pompas se jabón
o quizá, de nubes de algodón...
pero blanca y a la vez transparente
me quedo calmada y embadurnada
Es hora de separar otra vez las texturas
pero él se resiste a abandonar la suavidad de ella
aunque el agua que cae de las alturas
se encarga de ganar la batalla
a algo tan inevitable...
Bajo la lluvia
que va salpicando sobre mi cuerpo
mi pensamiento
vuelve a perderse en la locura
y apareces una y mil veces
siendo humedad, siendo ternura
Tiempo que se quiere detener
para gozar de ese beso en la piel
Cómo cuesta hacer que la lluvia cese
y solo el vapor de un suspiro quede
El algodón me atrapa
me va quitando cada gota que me toca
dejando paso a la ligera ropa
para llevarme hasta la alcoba
Perfume de rosas blancas...
aroma que podrás oler
cuando te acerques a mis sábanas
queriendo saciar mi sed...