le mita

Pisando el suelo

Pisando el suelo

a veces suelo

herrar el estribo

de mi empeine bruñido.

 

Llorando al acto

de repente al tacto

tocar el charco

con el cuerpo de chancho.

 

A mi madre quería

no logré lo que sería

sin falta podría

aprender lo que no es porquería.

 

Caminando derecho

lograré lo que es provecho

sin dudas tendré un  techo

no la penas que endecho.

 

Si la derecha recibe

de la zurda el aljibe

ambos beberán del jengibre

no la disgusta que perciben.