Su nombre, a pesar de ser uno común, retumbaba en mis oídos.
Que bella sensación, cuando su piel rozaba mi piel.
Cada vez que su boca decía que me amaba, sus ojos acompañaban sus palabras.
Amor ¿donde estas? ¿Por que has tardado tanto en regresar?
¿No puedes ver, que mi alma por ti se encuentra en velo?
Los recuerdos me atacan sin piedad.
Eres esa imagen viviente, que se repite una y otra vez en el televisor de mi mente.
Mi corazón por ti, se rebela hoy.
Por que tu amor, aún es mió.
Mis ojos, también acompañan mis palabras.
Y tú, en algun momento...
Inevitablemente, volverás a mí.
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AUTORA: ORIANA RAVELO.