Y te extraño tanto como tú no lo haces.
Me haces falta al igual que a ti mi mirada,
si pudiera decir que ésto es sólo una mentira,
tragarme las penas y remarla, se que me dolería.
Querernos como se quieren los ángeles del cielo
forma parte del libro de los sueños con fin;
por dentro de mi sangre el miedo corre veloz,
¡si pudiera pensar que ésto es una mentira!
El viento cruel, lastimoso, impiadoso, separa las almas,
a ti y a mi el agua del río no nos deja juntar;
en penumbras, durante las noches me suelo dormir
aunque entre tus brazos de luna quisiera despertar.