Jose Luis Santiago

SALMO A LA MUERTE

Tú que algunas veces inesperada llegas

y cuando no en el anciano plazo

en el que, si la memoria no se ciega

cana y ausente criba en su cedazo

mocedades.......

tras las pellejas carnes, sienes y cejas,

 

Tú que llegas y muy poco te entretienes

y te pintan con huesos y oscuros trazos

tu que te impones a golpe de severo mazo

y siegas de cuajo sin recoger bienes

tú desatas miserables y temporales lazos