Puedo escribir los versos más exquisitos de mi vida,
vestirlos con lo más espléndidos ropajes
y adornarlos con las más bellas melodías;
pero si no te amase
serían letras andrajosas
rellenas con gotas de agua seca.
Puedo entregarte las joyas más puras y costosas
que realcen de tus ojos su belleza
reflejando lo que tus pupilas atesoran;
pero si no te amase
serían simples baratijas,
cataratas impregnadas en tus dos celajes.
Puedo entregarte los besos que más intensifican
la pasión que pinta el cielo cada tarde
cuando el sol y la luna cara a cara se miran;
pero si no te amase
sería todo un simple formalismo,
una espuma que pronto se deshace.
Si no te amase, vano sería el verso,
falsa la joya y el beso agrio…
una imitación indigna de rimas y silencios,
hiedras que dejarían amargado
tu paladar, tus pupilas, tus sueños,
marchitando tu jardín enamorado.
Amarte es ir, al fin y al cabo,
más allá de los versos exquisitos,
las costosas joyas y los besos que has amado…
es caminar hacia donde todo es infinito
a costa de entregar lo más íntimo y amado
fundiéndome en tus sueños, amor bendito