Con el viento y el cielo en tus alas
has vuelto a mi alcoba,
todo a tu paso has sacudido
Las cortinas, las sábanas
El insomnio que renace en tus ausencias.
Sé que vives por allí,
donde me visitas y donde te invoco
cuando te quiero imaginar cerca;
Y sé también que en caminar
no necesito más que tu existencia,
para saber que yo también vivo.