Turbulentos amoríos, que muy flácidos encallan,
en sus lúgubres pasiones, cual ficticias ilusiones;
son como puertos escondidos, que al alma acallan,
engañados de por vida, en sus hados de emociones.
Tramando con cinismos y con ansias empedradas;
marchitando al verdadero amor, en su triste agonía,
hundiéndose en la ironía van, a los abismos cada día,
¡Energúmenos! Destrozan a las almas conquistadas…
Hilvanando esperanzas al azahar, buscando van cariño;
suelen tender sutiles trampas, minando su alrededor,
bajo las incertidumbres, de un ¿si me quieren o no?
van ahogando en angustias, conciencias hacia el dolor.
Usando un antifaz de sinceridad, cual ilusos portales,
ocultándose en lascivias desenfrenadas tras el monitor,
ansiosos de placeres van, regando sentimientos banales
oscuras intenciones, hieren los nobles corazones, de dolor.
¡Tener cuidado! Con esas alimañas, traficantes del amor,
muchos pululan por las redes, embusteros repugnantes;
su filosofía es agredir sistemáticamente a los crédulos,
a los puros, a los limpios,
dañándoosle vilmente el corazón...
EN LA INMENSA Y AÑEJA
EXISTENCIA DE LA VIDA
¿UNA SENSIBLE ROSA MORIRÍA?…
(victolman)