Ricardo de Sarria

Ríos del averno

Adiós…crueles palabras que revientan en mi pecho cual oleaje furioso…adiós sin inmutarte…témpano que cala el  alma y los huesos temblorosos…impávido rostro sin rastro alguno de pena  ni  gratitud…la dignidad me invade de súbito… es más fuerte por un instante que el dolor asesino que me consume…vuelan mis pensamientos con gorro de petaso y en mis pies crecen talares para desaparecer de tu presencia a la velocidad dela luz…cual  Hermes… el mensajero celaje de los dioses griegos…busco el río Cocito del averno para colmar de lágrimas saladas mis pupilas despavoridas…me sumerjo en el río Lete del olvido instantáneo para no sufrir…a tientas me hundo en el río Flegetonte llameando de fuego…hirviendo en el caldero de tu indiferencia…adiós…Caronte el barquero del infierno me espera a bordo…adiós…