El amor llego a mi vida
en una soleada tarde de verano,
cuando triste de la vida
mi corazón en vano
del amor ya nada esperaba.
Y llegaste tú
envuelto de amor y ternura,
derrochando le frescura
de tu tierno y amoroso corazón.
Al verte
mi corazón palpitó fuertemente,
vi… la luz resplandeciente
que me habría el camino
directo a tu destino.
Corrí hacia tus brazos,
mis labios palpitantes
rozaron con los tuyos
sentí un torrente
de sentimientos compartidos.
¡El amor por fin
a mi vida ha llegado!,
eres tú al que yo
tanto tiempo he esperado.
Amor de mis sueños
por fin realizado,
bendigo a Dios
por haberte encontrado.
Me tomaste de la mano
yo feliz tomé la tuya,
caminamos en silencio
por el camino
largo y hermoso
del amor, la pasión
y la ternura.