Mi poesía es una realidad,
aspirar por tu amor no es una utopía,
aunque no haya buenos presagios,
mis versos muestran el rostro de la alegría.
Cada boceto en mi corazón,
cada intento en el amor,
son signos de inspiraciones,
son luchas en todas sus dimensiones.
Del amor se aprende,
un corazón encantado vende,
vende episodios inolvidables,
supera situaciones indomables.
La principal maestra es la paciencia,
de este amor espero su sentencia,
las crónicas líricas siguen su marcha,
en mi rol de poeta no pierdo mi esencia.