Son miles las hojas de un árbol,
como son tres las hojas de un trébol.
Es la comparación que yo hoy hago,
y es la imagen cuando te sueño.
Son muchos los sentimientos míos,
son tres los sentimientos tuyos.
Ya te quiero y te sueño en demasía,
y no lo sabes y te alejas cada día.
Es tanto lo que te estimo,
y es tan poco lo que me animo.
Son tantos nuestros encuentros,
y son tan largos nuestros silencios.
Son tan bellos tus ojos claros,
son tan tontos mis ojos al mirarlos.
Y es tan grande tu dominio,
y es tan grande mi quebranto.
No calles tus tristezas amiga,
no calles tus alegrías.
Sólo grita si así lo quieres,
sólo sonríe si así lo prefieres.
Es tanta tu hermosura,
y es tan poca mi valentía.
Es demasiada tu ternura,
y es muy rara mi cobardía.
¡Qué lindo será el día amiga mía!
¡Qué lindo será el día sueño mío!
Sólo bastarán mis palabras en el día,
sólo bastará una sonrisa en el frío.
¡Qué lindo será el día querida!
¡Qué dulce será la alegría!
Y será bello el día que me quieras,
y bella será su melodía.
Qué lindo será el día amiga mía...
cuando leas esta poesía.
Martin Ruiz Díaz Díaz.
10/mayo/2010